Héctor Manuel Popoca
Boone.
En la reunión del grupo, Guerrero es Primero, del 12 de enero
pasado, los compañeros, Jesús Mendoza, Jean Mendieta y Carlos Juárez,
presentaron el perfil de un proyecto para la creación del Instituto Autónomo
para la Paz en Guerrero (IAPG). A todas
luces, una iniciativa ciudadana urgente e idónea ante las circunstancias
difíciles por las que atraviesa el estado.
Para transformar por vías
pacíficas los conflictos y las diversas violencias sociales, es necesario reconocerlas
y analizarlas en todas sus causas y dinámicas, a través de investigaciones
históricas, de coyuntura y de carácter prospectivo, como condición necesaria
para erigir una sólida plataforma constructiva de la paz; digna, justa y
duradera.
Dicho basamento, permitirá
el diseño de nuevos comportamientos colectivos y programas gubernamentales de
transformación social -dentro del marco de la ley y la justicia- que den
soluciones de mediano y largo plazo; atendiendo los diversos factores que
generan la desigualdad social, pobreza, desempleo, delincuencia, ilegalidad, corrupción
e impunidad, a guisa de ejemplos. Mismos que debilitan la legitimidad
institucional, dando como resultado altos niveles de violencia y criminalidad.
Guerrero
es Primero aprobó la elaboración del proyecto definitivo para
gestionar los recursos económicos necesarios para establecer la infraestructura
del IAPG. Bajo el tenor de que las crisis de violencias exacerbadas han sido
cada vez más recurrentes y poliédricas, y que, por lo mismo, su tratamiento y
erradicación reviste complejidad y amerita aplicación de corto y mediano plazo.
Se plantea ser una institución que promueva estudios y análisis enfocados al conocimiento de las violencias que se presentan en cada una de las regiones del estado. Avanzar en la comprensión de los factores que les dan origen, con sus propias peculiaridades territoriales, a la par de elaborar proyectos y procesos de paz social, comunitaria y regional. Es decir, su motivación principal será lo propositivo.
Se plantea ser una institución que promueva estudios y análisis enfocados al conocimiento de las violencias que se presentan en cada una de las regiones del estado. Avanzar en la comprensión de los factores que les dan origen, con sus propias peculiaridades territoriales, a la par de elaborar proyectos y procesos de paz social, comunitaria y regional. Es decir, su motivación principal será lo propositivo.
El IAPG pretende una
estrecha comunicación, vinculación e interactuación con la ciudadanía. Que
incluya, una vez alcanzado cierto grado de madurez, la posibilidad de mediación
de conflictos y el establecimiento de espacios de dialogo entre las partes
conflictuadas. De ahí la importancia que sea una institución con autonomía,
reconocida por todas las autoridades, instituciones y organizaciones
competentes. Con patrimonio propio y financiada con fondos públicos,
aportaciones de organizaciones civiles y fundaciones privadas que le sean
afines.
Uno de los propósitos del
Instituto es la construcción de capacidades que abonen a la paz, en todos los
actores que participan en los diferentes ámbitos político-económico-sociales de
las regiones del estado. También su distintivo será la estrecha integración con
los movimientos pacifistas comunitarios que emanan desde lo local. De ahí su
configuración como una institución en red, incluyente, horizontal y con mucho
espíritu de cohesión social.
Suscribí la propuesta,
con la recomendación que el IAPG no se convierta en un castillo de la pureza
teórico-analítica, un espacio de confort académico o un edén magisterial que
únicamente se asome a la realidad circundante para determinar qué de ella les
es útil y de prestigio para el desarrollo curricular personal.
Para que no
resulte costoso el mantenimiento de sus campus y la planta tutorial-docente en
las diversas regiones del estado, el Instituto hará uso de la educación a
distancia, con las técnicas audiovisuales y didácticas que posibilitan los
últimos adelantos de la telecomunicación digital.
PD1. Mientras estén en
prisión, Nestora Salgado, Gonzalo Molina y otros policías comunitarios, será
vacuo solicitar el respaldo de la ciudadanía contra la delincuencia. El
gobierno federal y estatal nunca les obsequiaron el debido proceso. Simple y
llano. Como diría la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
PD2. Ante las graves
revelaciones que hizo el Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong,
nadie absolutamente se sentirá seguro en Acapulco.