El nada fantasmal desempleo recorre todas las regiones de Guerrero. Sobre todo en la Montaña y en la Sierra. La economía estatal ha retrocedido vulnerando la ya de por sí mala calidad de vida del pueblo. Los únicos gañanes han sido unos cuantos empresarios, políticos y gobernantes inescrupulosos que, en el marco del saqueo al erario público, acumularon grandes haberes monetarios para sus venideras generaciones.
Es sumamente difícil la generación de trabajos en una economía estancada. De inicio, la iniciativa privada no los crea mientras no haya demanda efectiva para sus productos. Toca al gobierno desatar un círculo virtuoso de empleos por medio de la inversión pública, aún cuando sean de carácter temporal.
Dentro de estos programas destaca la construcción, rehabilitación y mantenimiento de los caminos rurales con uso intensivo de mano de obra. Política pública aplicada en el país en la década de los setentas del siglo pasado. Hoy casi en desuso para beneficio de unas cuantas compañías constructoras de caminos que los hacen con fuerte aplicación de maquinaria.
Para detener la fuerte migración indígena e incrementar el ingreso monetario de los más pobres es menester volver a implementar el programa de caminos de mano de obra en Guerrero, al menos en la región de la Montaña.
Con ese programa, los proyectos camineros pueden generar alrededor de 2 mil 500 personas/día de empleo, por kilómetro construido o reparado. Como resultante, del 40% al 50% del gasto total por obra, puede ser distribuido en sueldos, a diferencia del 5 al 10% que arrojan proyectos intensivos en capital fijo.
Los caminos de mano de obra ofrecen también la alternativa de brindar un mantenimiento preventivo de bajo costo. Las técnicas basadas en mano de obra no implican la eliminación completa de la maquinaria, sino su reemplazo parcial selectivo.
Un programa de construcción de caminos con mano de obra no prospera cuando se privilegian los intereses económicos de contubernio entre las empresas constructoras y los gobernantes. Cambiar una tecnología lucrativa para pocos, en beneficio de una para muchos no es fácil por las obvias resistencias a que da lugar.
Sin embargo, no se trata de desplazar a las empresas constructoras. Se deben prever programas de asesoría para aquellas que quieran participar bajo esta modalidad a fin de garantizarles la oportunidad de tener trabajo también.
En conclusión, los caminos de mano de obra deben tener la más alta prioridad gubernamental, para asegurar la generación de empleos rurales. Los gobiernos de los estados de Durango y Querétaro lo hacen con éxito.
La Organización Internacional del Trabajo y más recientemente el Banco Mundial (aunque usted y yo no lo creamos) han sido los impulsores de este proceso ante la evidencia de los beneficios sociales logrados, en zonas de pobreza extrema.
PD1. ¿Dónde está el periodista Marco Antonio López Ortiz? ¿Alguien lo ha visto? ¿Quién lo tiene? ¿Quién sigue?
PD2. El PRD-Guerrero sigue funcionando, impunemente, en su ilegalidad interna y con proliferación de más facciones políticas. El PRI-Guerrero sigue secuestrado por la mafia política local encabezada por Rubén Figueroa Alcocer. ¡Sálvese quien pueda de la partidocracia imperante!
PD3. No se hagan bolas. A la cenaduría, con Popoca porque ya le toca. Se aceptan invitaciones a cenar.